KREATOR – Violent Revolution (ALBUM REVIEW)

Cuando nos sentamos a escribir o conversar sobre lo bueno, lo malo, lo feo o lo mejorable, intentar hacerlo de manera objetiva es un ejercicio que cuesta más de lo que queremos admitir. Toda opinión, para bien o para mal, tiene mucho de gusto personal, especialmente cuando quienes tenemos la misión de comunicar hablamos de un tema que nos apasiona.

Este disco llegó a mis manos en formato físico durante mi etapa de estudiante y me impactó profundamente. Por eso, comienzo esta reseña con un disclaimer: intentaré ser lo más objetivo posible al hablar de una de las joyas del thrash metal.

Usualmente, los discos comienzan con una parte instrumental como recurso estético y para anticipar el contexto. Sin embargo, en este caso, no hay intro y Reconquering the Throne, es una masa demoledora de sonidos que nos entrega un mensaje importante: su retorno al thrash era con todo y sin vuelta atrás.

A pesar de ser una vuelta a su sonido original, también se puede percibir una evolución a lo largo del disco, las razones las analizaremos con más calma más adelante. Por lo pronto, podemos decir que la cantidad de cambios de ritmo y de riffs que van desde lo más veloz hasta lo más “doom”, este inicio de disco es un viaje que viene a confirmar un crecimiento  y una madurez musical, de una banda que ya por entonces estaba ad portas de superar las dos décadas de actividad. 

The Patriarch, suena como el intro del disco, pero no lo es, aunque si fue usado como puntapié inicial de la gira del disco, que posteriormente significó el DVD que lleva por título Live Kreation, y del cual se desprende un manejo de armonías en tonalidad menor a dos guitarras, denotando la habilidad compositiva tanto de Mille Petrozza, como de su reciente par, el finlandés Sami Yli-Sirniö, quien por entonces se había unido de forma indefinida a la banda, en reemplazo del suizo Tommy Vetterli. 

Violent Revolution no necesita mayor análisis, es hasta hoy, uno de los temas obligados de la banda en sus en vivos, y donde sacan a relucir en cierto modo, las influencias del sonido de Gotemburgo, de acuerdo a lo expresado por el mismo Petrozza. 

All of the Same Blood, es un tributo al thrash metal de antaño, con guitarras filosas, bajo monstruoso y la batería de Ventor sonando como una incesante matraca. Una de esas joyas ocultas que muchos de nosotros esperamos que caiga inesperadamente en el setlist de sus presentaciones en vivo.

Los tresillos del bajo en Christian “Speesy” Giesler en Servant in Heaven-King in Hell, suena como una mecha que detonará un bombazo en cualquier momento. El galope de los riffs le dan una cansina potencia, dándole una siniestra obscuridad y aunque el retorno al thrash era inminente, tanto en esta canción como en Second Awakening, podemos apreciar las múltiples influencias del industrial y el metal más moderno, pero con la madurez de una banda clásica. Supieron amalgamar su etapa más experimental de los noventas, con su sonido ochentero más veloz y potente.

Esos tambores tribales en los intros de Jürgen “Ventor” Reil, se han vuelto un sello del eximio baterista. Una prueba de ello, es Ghetto War, que utiliza este recurso en una doble función, el primero como aviso para que entren el resto de los instrumentos y para interactuar con la gente cuando la tocan en vivo. En ambos casos, siempre funciona. La sonoridad en la primera guitarra a cargo de Sami Yli-Sirniö, le otorga un giro distinto a los arreglos de guitarra, y sin sonar ofensivo, el “nuevo Kreator”, a contar de este disco, es más inteligente, con mayor manejo de armonías y con más variantes.

En sus primeros tres o cuatro discos, no habrían tenido cabida canciones como Replicas of Life y desde este disco en adelante, podemos observar un sello distintivo en sus composiciones, podemos dar dos claros ejemplos, el primero es que el intro más “melódico”, lo veremos más adelante como un recurso estético en canciones como Voices of the Dead y en el coro, repetirían la estructura en uno de sus grandes éxitos de esta nueva etapa, como lo es Enemy of God, adicionalmente hay una parte antes del solo que se parece mucho a United in Hate. Ojo, no suena ni repetetivo ni a autocopia, si no que como una forma de sonar a ellos mismos, después de una década de búsqueda y experimentación. Un trabajo sólido y maduro, de uno de los pilares del thrash alemán.

¿Se puede sonar thrash e industrial al mismo tiempo? La respuesta es sí, Slave Machinery es la mezcla perfecta e indisoluble de dos estilo diametralmente opuestos en algunas de sus formas y que sin embargo de manera magistral se ven plasmadas en este trabajo a medio ocultar, en un disco que tiene definitivamente más aciertos que fallos.

En cuanto al disclaimer del principio, este es uno de los motivos, Bittersweet Revenge, es a mi parecer una de las mejores canciones de este disco por distintos motivos, el primero de ellos y fundamentalmente, es que esta canción lo tiene todo, un intro potente, bien pensado, donde todos los instrumentos se lucen en conjunto y por separado, con riffs poderosos, una letra que hace hervir la sangre de las venas y una estructura inteligente, con cambios de ritmo, un paseo por las catacumbas más profundas del metal en poco menos de cinco minuto uns y medio, otra de las razones es la calidad en las armonías de ambas guitarras, las cuales sin ser pretenciosas tienen detalles que resaltan las cualidades compositivas del maestro Petrozza con el sello de Yli-Sirniö

Mind of Fire, es uno de los puntos más bajos en el disco, ya que pese a ser una buena canción no resalta tanto en el tracklist, es algo más monótona, pero sin embargo tiene la duración suficiente como para no aburrir; aún así, se nota que es parte de la búsqueda, ya que hay canciones de incluso el disco Hate über Alles, que tienen bastantes similitudes, como por ejemplo Pride Comes Become The Fall. Finalmente, como cierre del disco tenemos System Decay, con algunas reminicencias de lo que fue su trabajo en Cause for Conflict o Outcast, con un ritmo más heavy que thrash y con esa vibra a Phobia, tan caracteristica en Kreator.

En conclusión, uno de los trabajos que cimentó este nuevo Kreator que a mi juicio y sin desmerecer sus inicios, es más inteligente, con más recursos tanto estéticos como de composición y que además sirvió de inspiración para la nueva oleada de bandas de todos los estilos.

KREATOR – Violent Revolution – Fecha de Lanzamiento: 25 de Septiembre de 2001 – Sello: SPV/Steamhammer Records

Calificación: 9.5/10