Brymir, Serenity y Battle Beast: El Trío que Sacudió Hole44 en Berlin
Review por Gerardo Pérez G.
Después de un largo año de espera, el pasado 23 de septiembre Battle Beast finalmente regresó a Berlín para un show que había sido pospuesto, pero que valió cada minuto de anticipación. Junto a ellos estuvieron sus compatriotas Brymir y la banda austro-italiana Serenity, completando un cartel que prometía una noche inolvidable para los amantes del metal en sus diversas formas. El evento tuvo lugar en el popular Hole44, un lugar en el corazón de Neukölln que ya es conocido por ser un refugio de la música en vivo y que en esta ocasión logró agotar todas las entradas con semanas de antelación.
Aunque muchos de los asistentes probablemente tuvieron que sacrificar un día de trabajo al día siguiente, el entusiasmo era palpable. El debate sobre si es conveniente que los grandes conciertos se realicen entre semana en Berlín siempre está presente, pero si hay algo que nos quedó claro esa noche es que comenzar la semana con la energía desbordante de Noora Louhimo y compañía es un lujo que pocos quisieron perderse. A veces, esos lunes (o martes) pesados valen la pena, sobre todo cuando el metal corre por tus venas.
Brymir: Melodía y potencia desde Finlandia
La velada comenzó con los finlandeses Brymir, una banda que, aunque muchos no conocían en detalle, rápidamente conquistó al público con su death metal melódico. Y es que Brymir tiene esa fórmula perfecta que mezcla la agresividad del death metal con pasajes melódicos que calan profundo. La banda no necesitó grandes despliegues escénicos, ni efectos especiales para hacer notar su presencia. En su lugar, apostaron todo a la música y al carisma de su vocalista, Viktor Gullichsen, quien mostró desde el primer minuto una energía arrolladora.
Una de las claves del éxito de Brymir fue, sin duda, la cercanía que lograron con el público. Gullichsen compartió anécdotas de su vida en Berlín, lo que generó una conexión inmediata con la audiencia local. Y aunque Brymir no tenía el espacio ni los recursos para un espectáculo visual deslumbrante, lo suplieron con una entrega musical que dejó a muchos sorprendidos. Los riffs melódicos y potentes de sus guitarras, junto a la agresividad controlada de los ritmos, hicieron que su set fuera una apertura de lujo.
Algo que también llamó la atención fue que, debido a la baja parental de su guitarrista Joona Björkroth, la banda contó con un músico invitado para cubrir su ausencia. No obstante, este cambio no afectó en lo más mínimo la calidad de la presentación, y la banda funcionó como una máquina bien engrasada, lista para preparar el terreno a los siguientes actos.
Serenity: Un toque sinfónico inesperado
Después de la presentación cargada de energía de Brymir, el escenario quedó listo para los invitados especiales de la noche: Serenity. La banda de symphonic power metal ha construido una reputación sólida en la escena europea y Berlín ya les resulta familiar, pues en febrero de este mismo año fueron headliners en la ciudad. Esta vez, sin embargo, el show fue especial por una razón muy particular: su vocalista habitual, Georg Neuhauser, no pudo estar presente debido a una enfermedad que lo apartó de varias fechas de la gira. Pero Serenity no canceló su participación, sino que optaron por contar con un reemplazo de lujo: Marco Pastorino de Temperance.
Pastorino no es un extraño para los seguidores de Serenity, ya que ha trabajado con la banda como guitarrista y segunda voz. Asumir el rol principal no fue una tarea fácil, pero el italiano lo hizo con confianza y determinación. Desde el primer momento, se sintió cómodo en el escenario y la respuesta del público fue positiva. El setlist estuvo centrado en su último disco, pero también hubo espacio para repasar algunos de los temas más icónicos de su discografía. El público berlinés, siempre apasionado, respondió con entusiasmo a cada canción, mostrando que Serenity ha sabido ganarse un lugar en sus corazones.
El ambiente ya estaba bien caldeado cuando Serenity terminó su set de 45 minutos. Aunque fue un show breve, la banda dejó una huella imborrable en la audiencia, y el hecho de haber contado con Pastorino al frente le dio un toque único e irrepetible a la noche.
Una noche de metal: El momento del ataque de Battle Beast
Con el público ya encendido tras las actuaciones de Brymir y Serenity, llegó el momento más esperado de la noche: la entrada de Battle Beast. Desde el primer segundo, la energía fue desbordante. La banda ha estado realizando una movida interesante en esta gira, transmitiendo muchos de sus conciertos en vivo a través de su canal de YouTube de forma gratuita, lo que ha permitido que fans de todo el mundo puedan unirse al espectáculo de manera remota. Una idea innovadora que, sin duda, amplía su alcance y hace que más seguidores puedan disfrutar de su música en tiempo real.
Noora Louhimo, como es habitual, se adueñó del escenario desde el primer momento. Su desplante escénico y poderosa voz fueron el centro del show, y aunque Battle Beast es una banda en conjunto, es difícil no admitir que Louhimo es el corazón palpitante del grupo. La vocalista demostró por qué se ha consolidado como una de las mejores frontwomen de la escena actual, llevando al público en un viaje de pura adrenalina.
La evolución de Battle Beast: Innovación y nostalgia
Algo digno de mención es que esta gira trajo a Battle Beast de vuelta a Berlín por segunda vez en el mismo ciclo de álbum, presentando prácticamente el mismo setlist y show que ofrecieron a principios de la promoción. Para los seguidores que han asistido a múltiples presentaciones de la banda, esto puede ser un tema debatible. La falta de variación en el setlist, y el hecho de que la banda ya no interpreta temas de sus primeros tres álbumes, podría decepcionar a los fans más nostálgicos. Los temas clásicos de su época con Anton Kabanen han quedado atrás, y parece que no volverán a incluirse en sus futuros shows.
Sin embargo, la banda ha sabido reinventarse con éxito tras la salida de Kabanen, cosechando éxitos con cada lanzamiento posterior y expandiendo su base de seguidores. Y es que, a pesar de los cambios, Battle Beast sigue siendo una máquina bien aceitada, capaz de mantener a su audiencia completamente inmersa durante más de hora y media de concierto. La innovación es parte de su ADN, y aunque han dejado de lado una parte de su pasado, no cabe duda de que están mirando hacia el futuro con nuevos sonidos y propuestas.
Un final lleno de promesas
Al cerrar el show, Battle Beast dejó a la audiencia con una promesa: después de esta gira, la banda entrará al estudio para grabar su séptimo álbum. Esto significa que los fans pueden esperar más música de la banda finlandesa en un futuro cercano. Y con el nivel de energía y entrega que mostraron en el Hole44, es evidente que todavía tienen mucho que ofrecer.
Para quienes no pudieron asistir al show, no todo está perdido: las transmisiones en vivo de sus conciertos en YouTube continúan, y desde Metal Addiction seguiremos cubriendo cada paso de la banda. Además, muy pronto publicaremos nuestra entrevista exclusiva con Noora Louhimo, así que mantente atento a las novedades.
¡Nos espera mucho más Battle Beast en el horizonte, y nosotros estaremos aquí para contártelo!
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